POCO después de echar ancla cerca de Queresa en este memorable domingo, Jesús y los veinticuatro anduvieron un tramo hacia el norte, donde pasaron la noche en un hermoso parque al sur de Betsaida-Julias. Conocían este sitio para acampar, habiéndose detenido allí en el pasado. Antes de retirarse por la noche, el Maestro convocó a su alrededor a sus seguidores y habló con ellos de los planes para la gira proyectada a través de Batanea y Galilea del norte, hasta la costa fenicia.