LOS primeros maestros de la religión de Salem penetraron hasta las remotas tribus de África y Eurasia, pregonando constantemente el evangelio de Maquiventa de la fe y la confianza del hombre en un Dios universal como único precio para la obtención del favor divino. El convenio de Melquisedek con Abraham fue el modelo original de toda la propaganda primitiva que salió de Salem y de otros centros. Urantia jamás tuvo misioneros más entusiastas y enérgicos de religión alguna que estos nobles hombres y mujeres que llevaron las enseñanzas de Melquisedek por el entero hemisferio oriental. Estos misioneros fueron seleccionados de muchos pueblos y razas, y difundieron sus enseñanzas en gran parte a través del medio de los conversos nativos. Establecieron centros de adiestramiento en diferentes partes del mundo donde enseñaron a los nativos la religión de Salem y luego encargaron a estos discípulos la función de maestros dentro de su propio pueblo.