La materia es idéntica en todos los universos, a excepción del universo central. La materia en sus propiedades físicas depende de las velocidades de revolución de sus componentes, del número y tamaño de las partículas que giran, de su distancia del cuerpo nuclear o del contenido espacial de la materia, así como también de la presencia de ciertas fuerzas que aún no se han descubierto en Urantia.
En los distintos soles, planetas y cuerpos espaciales existen diez grandes divisiones de la materia:
1. Materia ultimatónica—las primeras unidades físicas de la existencia de la materia, las partículas de energía que forman los electrones.
2. Materia subelectrónica—la etapa explosiva y repelente de los supergases so-lares.
3. Materia electrónica—la etapa eléctrica de diferenciación material– electrones, protones y varias otras unidades que participan en la constitución variada de los grupos electrónicos.
4. Materia subatómica—materia que existe ampliamente en el interior de los soles calientes.
5. Átomos destruidos—que se encuentran en los soles en enfriamiento y en todo el espacio.
6. Materia ionizada—átomos individuales que han perdido sus electrones exteriores (activos químicamente) debido a actividades eléctricas, térmicas, de rayos X o de solventes.
7. Materia atómica—la etapa química de la organización elemental, las unidades componentes de la molécula o de la materia visible.
8. La etapa molecular de la materia—materia tal como existe en Urantia en un estado de materialización relativamente estable bajo condiciones comunes.
9. Materia radioactiva—la tendencia y actividad desorganizadora de los elementos más pesados bajo condiciones de calor moderado y de menor presión de la gravedad.
10. Materia desintegrada—la materia relativamente estacionaria que se encuentra en el interior de los soles fríos o muertos. Esta forma de materia no es realmente estacionaria; aún existe cierta actividad ultimatónica y aún electrónica, pero estas unidades están muy cerca unas de las otras, y sus velocidades de revolución están grandemente disminuidas.
La clasificación arriba mencionada de la materia pertenece a su organización y no a las formas de su aspecto ante los seres creados. Tampoco toma en cuenta las etapas pre-emergentes de la energía ni las materializaciones eternas en el Paraíso y en el universo central.