Esta primera gira misionera de los seis fue eminentemente fructífera. Todos ellos descubrieron la gran importancia de las relaciones personales y directas con los hombres. Regresaron a Jesús dándose cuenta más plenamente que, después de todo, la religión es pura y completamente un asunto de experiencia personal. Empezaron a ver cuán hambrientas estaban las gentes comunes de oír palabras de consuelo religioso y de aliento espiritual. Cuando se reunieron alrededor de Jesús, todos querían hablar a la vez, pero Andrés se hizo cargo de la situación, y según él los llamaba uno por uno, presentaron formalmente sus informes al Maestro y sus postulaciones para los seis nuevos apóstoles.
Jesús, después de que cada apóstol hubo presentado su selección para los nuevos apóstoles, les pidió a los demás que votaran por los candidatos; así pues los seis nuevos apóstoles fueron formalmente aceptados por los seis primeros. Entonces anunció Jesús que todos ellos visitarían a estos candidatos y les anunciarían el llamado al servicio.
Los nuevos apóstoles elegidos fueron:
1. Mateo Leví, el recaudador de aduanas de Capernaum, que tenía su oficina al este de la ciudad, cerca de los límites de Batanea. Él fue seleccionado por Andrés.
2. Tomás Dídimo, pescador de Tariquea y anteriormente carpintero y albañil de Gadara. Él fue seleccionado por Felipe.
3. Jacobo Alfeo, pescador y agricultor de Queresa, fue seleccionado por Santiago Zebedeo.
4. Judas Alfeo, el hermano gemelo de Jacobo Alfeo, también pescador, fue seleccionado por Juan Zebedeo.
5. Simón el Zelote era un alto funcionario de la organización patriótica de los zelotes, puesto que abandonó para unirse a los apóstoles de Jesús. Antes de unirse a los zelotes, Simón había sido mercader. Él fue seleccionado por Pedro.
6. Judas Iscariote era el hijo único de judíos ricos que vivían en Jericó. Era seguidor de Juan el Bautista, y sus padres saduceos lo habían repudiado. Estaba buscando trabajo en estas regiones cuando lo encontraron los apóstoles de Jesús, y Natanael lo invitó a unirse a sus filas especialmente porque era experto en asuntos financieros. Judas Iscariote era el único judeo entre los apóstoles.
Jesús pasó un día entero con los seis, respondiendo a sus preguntas y escuchando los detalles de sus informes, pues tenían muchas cosas interesantes y muchas experiencias fructíferas que relatar. Ahora veían la sabiduría del plan del Maestro de que trabajaran de una manera tranquila y a nivel personal antes de lanzarse a una campaña pública más ambiciosa.